Fundación Aliados por la Integración ha destinado 12.500 euros a becas de estudio para 40 jóvenes de Castilla y León que se encuentran en riesgo de exclusión social. La iniciativa forma parte de un convenio firmado en 2018 con la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, cuya reciente renovación permitirá sumar otros 4.000 euros para este próximo curso.

Las becas van destinadas a menores en situación de vulnerabilidad, acogidos a los sistemas de protección a la infancia y reforma de la comunidad, e incluyen ayudas para estudios reglados de Formación Profesional o de Grado, colaboración con los gastos de matrícula, material formativo, residencia, desplazamientos hasta el centro formativo o cualquier otro aspecto que esté directamente relacionado con la actividad educativa. 

Hasta el momento, estos fondos han servido, por ejemplo, para colaborar en la formación de jóvenes de León, Salamanca, Valladolid, Zamora o Burgos, que cursan diferentes especialidades, desde grados de Geografía y Ordenación del Territorio, hasta Sistemas Microinformáticos y Redes, pasando por Electromecánica de Vehículos o un Master en Europa y el Mundo Atlántico. También figuran en el programa menores que se están formando en oficios como la Panadería y Repostería, Jardinería o el Diseño de Aplicaciones Web.

 La presidenta de la entidad, Almudena Fontecha, ha expresado su satisfacción por los resultados obtenidos, ya que “tenemos el convencimiento de que no hay mejor herramienta de inserción social que el empleo. Fontecha incide, además, en que esta colaboración se dirige a menores y adolescentes que están o han pasado por el sistema de protección a la infancia, “un ámbito en el que los apoyos se hacen aún más necesarios para asegurar su correcta preparación en igualdad de oportunidades”.

Mercado laboral y Covid

El convenio entre Aliados por la Integración y la Consejería de Familia va más allá de la concesión de las becas. De este modo, establece también la realización de acciones dirigidas a facilitar la inserción laboral de los jóvenes con itinerarios personalizados de empleo, prácticas laborales, intermediación con empresas y otras medidas de acompañamiento enfocadas al fomento de la contratación. “Debemos tener en cuenta que, tal y como muestran diferentes estudios, son los jóvenes los que más están sufriendo las consecuencias laborales provocadas por la pandemia y tenemos la responsabilidad entre todos de ofrecerles una salida, máxime cuando a esta situación se suman circunstancias personales”, indica Almudena Fontecha.